lunes, 25 de marzo de 2024

El próximo brindis…

Con las suelas ya gastadas
de tanto caminar por
escondernos del viento del ocaso.
Y respirando el polvo
que dejó tu indiferencia,
buscando en mi cama el hueco
que anidó tras tu vuelo.
 
Colecciono fragmentos
de todo lo que rompí.
Y siempre llevo botellas conmigo
para el próximo brindis.
 
Corremos como perros
bajo la imponente lluvia,
bañándonos las ausencias.
Y cruzando aquella tormenta,
agitando banderas blancas
contra el olvido,
mientras la madrugada se arrastra,
andando, sin saber, ni entender.
 
Ya el río barrió con nuestros pasos,
mirá a donde fui a parar
por tropezar otra vez.
Guanteando la noche de este otoño,
sin querer llevo en mi garganta tu nombre.
 
Y así, voy y vuelvo a lugares
a los que no llego sin vos,
para tapar cicatrices,
junto las hojas que cayeron.
El cartucho se va quedando sin balas
y equivocando puertas ando sin consuelo.
 
Hagamos las valijas y huyamos de las sombras,
esta vez no rifemos nuestro corazón.
Mientras colecciono fragmentos
de todo lo que rompí.
Ahora llevo botellas conmigo
para el próximo brindis.