En el tiempo de descanso, seguramente conoció a una mujer y se enamoró de ésta, al tiempo habrá tenido hijos y tuvo que esforzarse trabajando aún más para mantener la casa, su mujer e hijos.
No pasó mucho tiempo hasta que se invento la propiedad privada, muchos soñadores creyeron en ella y siempre existió aquel comerciante que veía el negocio en los sueños ajenos. Y todo esto se convirtió en una obligación cultural con el correr de los tiempos…
Colorín colorado, esta historia nunca se ha terminado…